José Ignacio Jiménez escribió recientemente la introducción al informe Best Practices sobre Diversidad en España, elaborado por Talengo y que cuenta con el apoyo de la fundación HeForShe.

Nos parece relevante rescatarlo y que sirva de refuerzo la reflexión de un hombre que mira el mundo con incredulidad frente a las situaciones que se siguen dando pero con esperanza y por supuesto toda la energía para ser parte de la revolución o evolución que hace falta para que campañas como esta dejen de ser necesarias.


“Me resisto a pensar en un mundo que tiene en el año 2016 todavía que reclamar una mayor paridad de género. Me resisto casi a tener que escribir este preámbulo por ser tan obvio que la desigualdad de género es tan absurda y obsoleta, que debería formar parte exclusiva de los libros de historia. Pero también me resisto a ser una persona que mira para otro lado y no toma partido y acción cuando se producen claras injusticias en un mundo que está muy lejos de ser perfecto. Un mundo donde en buena parte de él las mujeres tienen todavía prohibido trabajar y siguen estando totalmente sometidas a un modelo social feudal.

Pero muchos de nosotros tenemos la suerte de vivir en la parte buena del mundo, aquella donde se ha conseguido a través de mucha tenacidad e infinitos sacrificios de muchos, un modelo social fundamentado en la meritocracia y en la igualdad de las personas como principios básicos. No obstante, este lado bueno del mundo sigue siendo también imperfecto y la última milla no está ni mucho menos recorrida. Sigue habiendo diferencias y discriminaciones de género que son evidentes para nosotros, privilegiados, con tan sólo darnos una vuelta por nuestras oficinas y ver quienes ocupan los mejores despachos y quienes las posiciones de staff o pradera. Para qué hablar de los consejos de administración de las compañías; el problema se produce desde la base y afecta a muchas más mujeres.

Por esto tiene todo el sentido apoyar la campaña HeForShe. Si no recorremos la última milla juntos, hombres y mujeres, siendo los primeros bandera orgullosa de la definitiva igualdad de género, nunca habremos alcanzado la ansiada meta. No lograr esta meta significa engañarnos a nosotros mismos, seguir pensando que nuestro lado del mundo es perfecto  y acomodarnos a él.  Queda mucho, quizás bastante más que esa milla, y no sólo debemos quedarnos en nuestro lado del mundo, debemos rebelarnos también con aquellas situaciones tremendamente injustas que sufren las mujeres en muchísimos lugares del planeta y seguir avergonzándonos y denunciarlas.
Me resisto a pensar que el mundo es así, pero me resisto mucho más a negar la realidad y aceptar la injustica. Por eso HeForShe.”