Caso de éxito

Construyendo tu camino

Una hoja de ruta individual para que en tres años los mejores profesionales desplieguen todo su potencial; así es como esta compañía multinacional ha puesto en marcha un plan de desarrollo de talento de sus valores más prometedores.

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Objetivo

Ayudar a la compañía a identificar y desarrollar a su mejor talento con las mejores metodologías en función de las fases del programa.
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Proyecto

Diseño de planes de desarrollo profesional one to one para los profesionales con mayor proyección de la compañía.
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Resultados

La empresa genera engagement y cuenta con una cantera de futuros valores preparados para asumir nuevos retos profesionales más allá del crecimiento en vertical. A su vez, los protagonistas asumen la total responsabilidad de su desarrollo, donde la empresa es únicamente un catalizador de su potencial.

Identificar el talento es primordial en una compañía y no siempre obvio. Son muchos los casos en que personas apoyadas por los mandos no tienen tanto potencial como otras que pasan más desapercibidas, bien sea por una cuestión de carácter bien por la visibilidad de su puesto.

Por eso esta compañía farmacéutica inició un proyecto de desarrollo de talento con un análisis previo para identificar a los profesionales con mayor proyección futura. Eso sí, escrupulosa con las formas, no quiso crear un grupo identificado como tal para no herir la sensibilidad de los demás profesionales, generar agravios o comparaciones.

De esta forma, el proyecto de desarrollo se ha generado a medida de cada individuo, un one to one que propone una ruta de tres años para que cada profesional desarrolle lo mejor de sí mismo.

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Cómo

Quién soy y quién quiero llegar a ser. Esas son las dos cuestiones clave sobre las que pivota el plan “construyendo tu camino”, que propone a los empleados asumir la responsabilidad de su desarrollo personal y profesional y construir una carrera que potencie sus habilidades.

El plan, absolutamente personalizado, propone a cada participante:

  • Una evaluación inicial para identificar fortalezas y capacidades; a partir de ella, el profesional se conoce mejor a sí mismo;
  • Una proyección de lo que quiere ser en un plazo de tres años, teniendo en cuenta las posibilidades que le ofrece la empresa y las acciones que debe incluir su plan de desarrollo personal. Para ello:
    1. El profesional enfoca sus ambiciones de forma conjunta con el departamento de RR.HH. para determinar si el objetivo está dentro de su expertise, en una carrera transversal dentro de la organización, en al ámbito internacional, etc.
    2. También junto con la empresa explora las posibilidades que le puede ofrecer la compañía, sus necesidades futuras y los puestos a los que puede aspirar.
    3. Fijado el objetivo, recibe un análisis de las habilidades y conocimientos que necesita desarrollar para cumplirlo y, con él, de las posibles barreras que deberá sortear y que limitan o podrán limitar su carrera.
    4. El mapa de ruta cierra el proceso de diseño e incluye información y una propuesta concreta de acciones sobre los círculos de influencia (personal branding), formación e hitos, tanto personales como por parte de la organización, y con un límite de tiempo.

El proyecto tiene innumerables aportaciones para ambas partes: en el caso de la empresa, además de preparar a una nueva generación de futuros líderes, es un ejercicio que le permite analizar en profundidad las posibilidades de su plantilla y sus propias necesidades, así como generar engagement con sus mejores valores; en el del profesional, asumir la responsabilidad sobre el desarrollo de su carrera.

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