La influencia de las nuevas tecnologías y la responsabilidad penal de las personas jurídicas son factores que están determinando las líneas de actuación que deben seguir los consejos de administración de las empresas.

Existe toda una serie de cuestiones legales a tener en cuenta por parte de las compañías, tal y como explica Deloitte Legal, que ha organizado con Talengo un ciclo de jornadas con el objetivo de que consejeros de distintas empresas compartan sus experiencias e inquietudes.


1.- Mayor implicación. Según José María Elías de Tejada, socio de Deloitte Legal, una mayor implicación de los consejeros en la estrategia y en las decisiones de la empresa es fundamental para el buen desarrollo de cualquier negocio: “No pueden limitarse a supervisar la estrategia, han de formar parte de su elaboración y revisión”. Además, las empresas exigen cada vez más a sus consejeros que tengan un amplio conocimiento del sector, del mercado y del entorno jurídico en el que se mueven, en definitiva, todo aquello que les permita una actitud proactiva en la toma de decisiones.


2.- Digitalización. No es ningún secreto que la digitalización ha de ser el soporte de la estrategia de cualquier empresa, y por lo tanto es imprescindible que los miembros del consejo de administración se formen, comprendan y usen las nuevas tecnologías (big data, redes sociales, etc.) y sean capaces de implementar modelos disruptivos de negocio.


3.- Compliance. El complicado entorno normativo obliga a las empresas a elaborar programas para asegurar su cumplimiento, los llamados planes de compliance. José María Elías de Tejada apunta que es una responsabilidad del consejo de administración elaborar modelos de prevención y gestión de riesgos de la empresa para evitar así una eventual responsabilidad de la misma.


4.- Riesgos. Pero no solo deben ocuparse de no incumplir la legislación sino también de gestionar los riesgos financieros, reputacionales, operacionales, fiscales e incluso tecnológicos. La ciberseguridad es una de las principales inquietudes de las empresas en la actualidad, y como tal, también es una materia en la que el consejo de administración debe involucrarse.


5.- Organización del consejo. A nivel interno, el funcionamiento de los consejos y sus órganos es otro de los grandes desafíos. Cada consejo de empresa se forma en función de las necesidades concretas de la empresa en cuestión. Sin embargo, en términos generales los consejos de administración cuentan con un presidente, consejeros ejecutivos, dominicales e independientes. Los consejeros independientes, al no formar parte del equipo directivo ni del accionariado de la empresa, cuentan con mayor autonomía en sus posiciones, por lo que sirven de contrapeso a los consejeros ejecutivos y dominicales, por lo que resulta aconsejable otorgarles una mayor relevancia.


6.- Gobierno corporativo. El gobierno corporativo es otra de las grandes preocupaciones que comparten los miembros de consejos de administración de cualquier empresa, los cuales consideran clave definir sus derechos, deberes y responsabilidades dentro de las corporaciones, a veces algo difusos.


7.- Consejeros. La carrera del consejero es otro de los retos que deben afrontar. En este aspecto la definición de los criterios de selección, la gestión de la sucesión o las políticas de remuneración son elementos clave para el desarrollo de la actividad del consejo.


8.- Perfiles diversos. Por último, otra de las asignaturas pendientes de muchos de los consejos de administración es la referida a su propia composición. La tendencia es que sus miembros tengan perfiles diversos en cuanto a edades, experiencia profesional, sectores e incluso sexo. De hecho, el objetivo que establece el código de buen gobierno de la CNMV es que el 30 % de los miembros de los consejos de administración sean mujeres, pero actualmente, según señala José María Elías de Tejada, esta cifra no llega al 15 % en España.


Fuente: Cinco Días, junio 2017