Ya ha pasado un año desde que el presidente de los Estados Unidos, Donald  Trump, ganase las elecciones a la Casa Blanca. Y diez meses desde que el mandatario se sentase por primera vez en el Despacho Oval. Y en todo este tiempo, sus políticas contra México, uno de los baluartes de su campaña, han dado sus primeros frutos, pero de forma totalmente contraria a la esperada.

“El efecto Trump, que era lo que más preocupaba en México, ha sido un revulsivo para ellos, les ha unido y la economía está creciendo”, cuenta José Ignacio Jiménez, socio de Talengo, consultora de liderazgo y búsqueda de directivos que, entre otras iniciativas, está conectando a varios ejecutivos españoles con diferentes compañías y organizaciones mexicanas.

[…] “Quienes suelen venir son perfiles que en el momento de la crisis se quedaron descolocados, gente con un alto nivel que se encontró fuera de juego. Suelen ser mayores de 50 años, con mucha experiencia y una trayectoria consolidada, que en España comienzan a tener sus proyectos muy maduros, con un horizonte temporal y limitado y con unas remuneraciones muy planas, casi inamovibles”, sostiene José Ignacio Jiménez. En México encuentran proyectos a 10 o 15 años vista, con un impacto económico alto y con vistas a dejar huella en el futuro tras un proyecto. “Es un camino muy interesante para estos directivos que están en la fase final de su etapa, y que encuentran en su destino una nueva carrera”.