Creemos que la diversidad es la clave del cambio del mundo tal y como lo conocemos.

La diversidad es una realidad en nuestras sociedades y economías. Países en el mundo entero están debatiendo sus políticas sobre inmigración, nacionalismo, comercio libre, igualdad salarial y derechos humanos. Para las empresas globales, raza, género y diversidad generacional son una realidad en su negocio. La llegada de las nuevas tecnologías y equipos virtuales que trabajan en entornos interconectados, requieren de un diálogo abierto, de habilidades distintas y experiencias funcionales diferentes para poder resolver problemas complejos y acelerar la innovación.

Entendemos que la gestión estratégica de la diversidad introduce un elemento transformacional en la estrategia de una organización.

Sin embargo, la diversidad no siempre genera riqueza e innovación. La diversidad sin liderazgo es caos. Para que aporte valor ha de ser bien gestionada. La estrategia para conseguir ese valor es la inclusión y la figura clave es el líder inclusivo, que crea valor sostenible, a través de conexiones y sinergias, entre los grupos de interés dentro y fuera de la organización. En palabras de Malcom Forbes “la diversidad es el arte de pensar independientemente todos juntos.”

Las organizaciones que valoran la singularidad de cada persona, que escuchan y respetan a cada uno, cosechan los efectos multiplicadores de la diversidad.