Marta García-Valenzuela, socia de Talengo, habla sobre diversidad estratégica en el diario económico Expansión.

La participación femenina en el mercado laboral ha sido el detonante de las primeras políticas de diversidad. Aunque el 87% de las empresas españolas tiene, al menos, una mujer al mando. Aumentar esa presencia en puestos directivos sigue siendo el gran desafío.

Que la mayoría de las excedencias y reducciones de jornada por el cuidado de hijos las soliciten las mujeres es uno de los motivos que suponen un freno en su carrera hacia puestos directivos en las organizaciones. Sin embargo, no es el único. Hay mujeres sin hijos que tampoco consiguen el ascenso que desean porque la empresa en la que trabajan no lo facilita, prioriza o promueve. Más allá de la demagogia y de las modas, la diversidad de género es la punta de lanza de las políticas de inclusión, el primer paso para sentar las bases de una diferencia necesaria en las empresas que quieran aumentar su competitividad.