Rafael Sarandeses, Head of Financial Services at Talengo, ha participado en el análisis de la “nueva normalidad” tras el Covid-19 en el mercado de la financiación en Capital & Corporate.

Rafael Sarandeses afirma que: “Todavía muchos fondos confían en su instinto para calibrar si el equipo gestor tiene lo que necesita la compañía para los próximos 2-5 años. Pero es un mundo nuevo, y en Talengo estamos evaluando participadas para fondos de private equity precisamente para asegurar objetivamente que estas competencias se dan. En un momento como el actual, contar con una due diligence objetiva de liderazgo, al mismo nivel que la financiera o legal, cobra especial relevancia y puede dar mucha tranquilidad a los LPs.”

Añade, además que crisis como la actual son procesos de selección natural de empresas, de los que salen reforzadas aquellas con los roles naturales claros y diversificados en sus equipos directivos y un modelo de liderazgo vinculado a la acción. A la hora de invertir en equipos gestores hay que ser consciente de cómo somos presas de sesgos que nos afectan a la hora de “leer” el potencial de esos equipos. Si a esto le sumamos la incertidumbre del momento actual, la decisión de no contar con un experto externo para evaluar objetivamente la capacidad de liderazgo y el ajuste competencial del equipo de una participada es una toma de riesgo que cualquier LP podría cuestionar en el momento actual.

Desde mitad del año pasado vimos en mercado un interés creciente por incorporar perfiles versátiles de financiación estructurada en grandes bancos y boutiques nacionales y extranjeros, y en cambio un menor interés por hacer crecer equipos ya existentes de M&A. En este momento esa tendencia se está acelerando rápidamente, con mucho interés por identificar talento para restructuring (especialmente operacional y turnaround). Vemos también con algo de sorpresa cómo algunos candidatos que hoy están en fondos están abiertos a volver a esos roles de restructuración en el sell-side.

En el mundo del capital riesgo este es el momento para el talento que sepa salir del “excel” y pueda remangarse y apoyar en directo la reestructuración de los modelos de negocio y las operaciones de aquellas participadas que van a sufrir con la crisis. Aquellos investment professionals con experiencia en situaciones especiales y un background híbrido (turnaround industrial, consultoría de operaciones, productos de deuda en CIB) serán muy cotizados en los próximos meses.