Vivian Acosta y Rafael Sarandeses hablan en el diario El País sobre los programas de alto rendimiento de Talengo, que ponen al comité ejecutivo frente al espejo y logran unión, confianza y eficiencia en el equipo.

El artículo detalla cómo en un escenario similar al de un comité de empresa, el gobierno del país, ha demostrado que las distensiones entre miembros socavan la confianza y traen consigo falta de alineación entre los equipos de trabajo. Una de las claves de un buen equipo es la presencia de perfiles cohesionadores que eviten las fricciones. Se trata de una figura que trae información del exterior sobre las implicaciones de las decisiones, tal como analiza Vivian Acosta, socia de Talengo. Según observa Acosta, en el Ejecutivo hay muchos perfiles impulsores que tratan de imponer sus brillantes ideas, arrasando a veces con sus decisiones.

Talengo ha desarrollado un método para que el comité ejecutivo estreche lazos y gane eficacia de cara a cumplir su reto compartido. Un programa que, debido a la pandemia, es más necesario que nunca “porque los directivos se están centrando demasiado en el corto plazo y precisan elevar la mirada o salir de la parálisis que les ha provocado el miedo”, prosigue la socia de Talengo. La firma está rediseñando su planteamiento, puesto que ahora ha de implementarse en remoto, todo un reto, ya que una de sus características es que indaga en las emociones de los ejecutivos para propiciar nuevos comportamientos.

Mediante intensas sesiones de trabajo, la compañía se centra primero en alinear la misión y la visión del comité ejecutivo. Cada uno expone su opinión sobre la estrategia de la empresa y cómo puede contribuir a ella desde su dirección. Analizando pros y contras de cada actuación. Después, el equipo debe identificar sus fortalezas y debilidades para conocerse. “Para que un equipo funcione, necesita que existan distintos roles. En las empresas españolas es muy frecuente que haya muchos cerebros e impulsores, gente que genera ideas, y suelen faltar personas que las analizan, dan seguimiento y perfeccionan. Es lo que debemos compensar”, indica Rafael Sarandeses, director de executive search en Talengo.